—Id allá y averiguad con diligencia acerca del niño y, cuando lo halléis, hacédmelo saber, para que yo también vaya a adorarlo.
9 Ellos, habiendo oído al rey, se fueron. Y la estrella que habían visto en el oriente iba delante de ellos, hasta que, llegando, se detuvo sobre donde estaba el niño. 10 Y al ver la estrella, se regocijaron con muy grande gozo. 11 Al entrar en la casa, vieron al niño con María, su madre, y postrándose lo adoraron. Luego, abriendo sus tesoros, le ofrecieronpresentes: oro, incienso y mirra. Mateo 2.7–11
En estas fechas la gente corre de aquí para allá, unos visitando a la familia, otros a comprar los regalos, o las compras de la cena; todos nos enfocamos en estas cosas, sin embargo, no se trata la navidad de Jesucristo? Es esta la fecha del nacimiento de Cristo?, la mayoría de nosotros sabemos que Cristo no nació en diciembre, pero aun así celebramos la navidad lo que seria el equivalente al cumpleaños de Cristo, y todos nos damos regalos, los unos a los otros; pero alguna vez has pensado en Dios en esta fecha? Y si es así, entonces que podríamos regalarle a Cristo?
El pasaje de Mateo nos muestra una de las “primeras navidades”; Cuando los magos llegaron con Jesus el tendría aproximadamente dos años, era un pequeño niño, mas sin embargo los sabios lo trataron como debía de ser: como el gran rey que había de nacer, el Mesias, el Hijo de Dios, como a Dios mismo, y es que aunque ellos traían tesoros (oro, incienso y mirra), el mejor regalo quepudieron darle fue su adoración:
“Al entrar en la casa, vieron al niño con María, su madre, y postrándose lo adoraron…”
Aunque ellos eran personas muy importantes muy ricos y respetados, ellos no dudaron en postrarse ante un niñito de dos años y adorarlo, esto fue posible porque ellos reconocieron que ese pequeñín era ni mas ni menos que el Rey de todo el universo; la adoración es pues, simple y sencillamente el reconocimiento de quien es aquel a quien tu adoras, la reverencia, el respeto, el temor, el amor; adoración no es solo cánticos o arrodillarse o inclinar
nuestra cabeza y cerrar nuestros ojos, la adoración a Dios va mas allá de eso, es reconocerlo a El como el Gran Rey, como el Señor de nuestras vidas, como el amor mas grande que has podido encontrar, y esa adoración es la que desea anhelantemente nuestro Dios, porque yo me puedo postrar falsamente, has oido ese dicho que dice:
“aunque me obligues a arrodillarme ante ti, nunca se arrodillara mi corazón”
La adoración entonces brota de un corazón arrodillado, postrado, rendido, ante Dios y Dios la percibe como un perfume agradable que sube a su Presencia, no en vano la Escritura dice que Dios busca adoradores que le adoren en espíritu y en verdad (Juan 4:23-24).
En este tiempo, dale el mejor regalo a aquel quien verdaderamente lo merece, Adora a Jesus con todo tu ser, ríndele tu vida, acéptalo como tu Señor y Salvador; en mediodelajetreo date una pausa, y piensa que la razón de la navidad es Cristo y en el año que se va recuerda, has memoria de todo lo bueno que El te a dado, salud, familia, finanzas, etc. Y en esa pausa hagamos lo que hicieron los magos:
“postrémonos y adoremos a Jesus el Señor y Dios del Universo ” Ese es el mejor regalo que le pudiésemos dar…