Ve pues, ahora, y escribe esta visión en una tabla en presencia de ellos, y regístrala en un libro, para que quede hasta el día postrero, eternamente y para siempre. 9 Porque este pueblo es rebelde, son hijos mentirosos, hijos que no quisieron oír la ley de Jehová; 10 que dicen a los videntes: «No tengáis visiones», y a los profetas: «No nos profeticéis la verdad, sino decidnos cosas halagüeñas(cosas suaves, cosas agradables para oír), profetizad mentiras; 11 dejad el camino, apartaos de la senda, quitad de nuestra presencia al Santo de Israel» Isaias 30.8–11
Una de las señales que mas se repite en la Biblia acerca del final de los tiempos, es la gran apostasía; sin lugar a dudas esto es algo que ya estamos viviendo en la iglesia cristiana a nivel mundial, el problema es que se a ido introduciendo poco a poco en la mente y en el corazón de los lideres, predicadores y en la iglesia sin que ellos lo estén notando.
Y uno de los aspectos o características de esta gran apostasía es que los cristianos ya no quieren oír la plenitud de la enseñanza de la palabra, una gran parte de los pastores que yo conozco están de acuerdo con las enseñanzas equivocadas de la prosperidad y de solo predicar a un Dios de amor y no juzgar a nadie para no ser juzgados, ser tolerantes con el pecado de los pastores o líderes y el de las ovejas y no hablar en contra de eso para no ofender a nadie; esto solo es un pequeño porcentaje de la gran magnitud de líderes y predicadores que piensan de la misma manera, y es que ellos se han dado cuenta de que las ovejas son caprichosas y que la mayoría de la gente no quieren que los corrijan.
Todo se ha vuelto como el efecto de la bola de nieve cuesta abajo, los pastores necesitan finanzas para la iglesia, para la “gran visión” que tienen y para sus salarios, las ovejas son las que dan esas finanzas con sus diezmos y ofrendas y como dije antes, ellas son caprichosas, si les hablas de sus pecados, muchos se ofenden y se van a otro lado, si los tratas de corregir (porque ellos muchas veces tienen sus propias ideas de como llevar el ministerio), entonces se van y abren ellos su propia iglesia para hacerla como ellos dicen: “de la manera correcta” y a su vez estas nuevas iglesias pasan por el mismo ciclo, así que de uno u otro modo, las finanzas se van con ellos, y los pastores y los lideres han aprendido a buscar la manera de tratar de complacer a estas personas y hacerlas sentir lo mejor posible para que no se vallan de la iglesia.
Existe también la presión religiosa de hoy en día en la cual el pastor, los lideres y los miembros se sienten constantemente presionados a crecer y a multiplicarse “aceleradamente” Porque “Dios es un Dios de multitudes” o porque llego un pastor o un “profeta” y les dijo que Dios quería que fueran una multitud, o sencillamente porque ellos han observado a otros ministerios “crecer aceleradamente”, y sin darse cuenta se están alejando de la voluntad de Dios al no hacer discípulos de Cristo a esas pocas ovejas que tienen y no se preocupan por llevarlos a que maduren y crezcan espiritualmente, también pasan por alto que la mayoría de ellos son carnales y no se preocupan por enseñarles a través de la palabra, que ellos deben de hacer morir su carne por medio del Espíritu Santo y de la aplicación de la Palabra de Dios en sus vidas; todo esto también lleva al mismo error, querer complacer a las ovejas caprichosas, para que “se multipliquen” y no se vallan de la iglesia, o tratar de ganar el mayor grupo posible de personas con métodos humanos y con puro entretenimiento carnal.
Josafat que era mas espiritual discernió que estos profetas como que algo les faltaba, como que no eran del todo honestos, o quizás vio que eran en realidad profetas de Baal, porque le dice al rey Acab:¿No habrá aquí además algún profeta de yhvh, para que consultemos por medio de él?
Acab entonces le responde: hay uno todavía, pero ese no me cae bien, no me gusta como predica, (voy a parafrasear) ese predica muy duro, siempre esta hablando en contra del pecado, habla mucho de los falsos profetas y de la sana doctrina, nunca me profetiza cosas buenas, solo habla cosas malas, casi nunca habla de la unción o de los milagros, no le gusta pedir doble ofrenda, y a la gente les señala sus pecados según el, para que se arrepientan; literalmente no dijo todo esto, pero lo que si dijo, contiene todo lo que he señalado.
Al final Acab termina trayendo al profeta Micaias, un verdadero hombre de Dios integro y temeroso del Señor, en el trayecto para encontrarse con los reyes el mensajero del rey trata de persuadirlo para que hable bien al rey y así gane su favor:
Y el mensajero que había ido a llamar a Micaías le habló, diciendo: He aquí, las palabras de los profetas declaran el bien al rey a una sola voz. Sea, pues, tu palabra como la de ellos, y anuncia el bien. Pero Micaías dijo: ¡Vive yhvh, que lo que yhvh me diga, eso hablaré!
Recuerdo que unos trece o catorce años atrás un predicador que vino a predicar a nuestra iglesia, llego con un mensaje diferente al que estábamos acostumbrados a escuchar, su predicación parecía describir todos los problemas con el pecado y la falta de liderazgo que allí había, se negó rotundamente a pedir ofrenda, algo que nuestro pastor tenia casi por regla para todos los predicadores invitados, realmente el mensaje de ese hombre de Dios empezó a motivar a algunos de nosotros a trabajar duro para buscar la madurez y el crecimiento espiritual que tanto nos hacia falta. Fue un enorme problema conseguir que lo invitaran a predicar en otras iglesias, a los pastores no les gustaba su forma de predicar y yo estuve muchas veces tentado a decirle lo mismo que el el mensajero de Acab le dijo al profeta Micaias, recuerdo muy bien quería decirle: mira hermano si quieres que te inviten a predicar, cambia tu mensaje, ya no les prediques del pecado, habla acerca de la unción, de los milagros y por favor pide la ofrenda… Que error mas grave hubiera yo cometido, gracias a Dios que no me lo permitió.
Pero siendo honestos a traves de los años en el ministerio de evangelista he aprendido lo duro que es predicar el mensaje que Dios te de para la iglesia en donde te toca predicar, el predicador se enfrentara a un dilema, predicar a Cristo o predicar lo que a los pastores les gusta oír, el problema de predicar a Cristo es que muchas veces vas a hablar la palabra de Dios en toda su extensión y la mayoría de esas veces será en el área que menos se trata en la iglesia, que es el confrontarlos con el pecado para que se arrepientan, esto, no es del agrado de muchos, y por lo consiguiente no vuelven a invitar a ese evangelista, lo que implica que no recibirá ofrendas y lo que implica a su vez que no podrá vivir de ese ministerio como lo mando el Señor(1 Corintios 9:13-14).
Esto provoca que los predicadores alteren el mensaje y empiezan a aprender cual es el mensaje que mas le agrada a los pastores para que lo inviten una y otra vez a sus iglesias a predicar y así recibir muchas ofrendas, déjenme les digo, que esta situación no solo pervierte el evangelio sino que los mismos hombres de Dios comienzan a perder gradualmente la santidad y el temor a Dios y terminan convirtiéndose muchas veces en lobos rapaces. Yo personalmente conozco a pastores, profetas, “apostoles” y evangelistas que dicen mentiras, aumentan la cifras, manipulan con lo espiritual, roban, adulteran, fornican, acosan a las mujeres y pastoras que son sensuales y jezabelicas, profetizan por conveniencia y manipulación, etc. pero en los púlpitos son excelentes expositores de lo que a la gente les gusta oir.
La generación que es como Acab es la generación que profetizo el apóstol Pablo en 2 Timoteo 4:2-4
Predica la Palabra, insiste a tiempo y fuera de tiempo, redarguye, exhorta y reprende con toda paciencia y doctrina. 3Porque vendrá tiempo cuando no soportarán la sana doctrina, sino que sintiendo comezón de oídos, se acumularán para sí mismos maestros conforme a sus propias concupiscencias; 4y apartarán el oído de la verdad, y serán extraviados a las fábulas.
Es la generación materialista que solo quiere que les prediquen paz y prosperidad, amor y salvación, riquezas y milagros, sin la necesidad de arrepentirse y de buscar a Dios en oración y en el estudio de la palabra, es también como la generación que profetizo Isaias, una generación que persigue a los megaevangelistas y a los superapostoles y a los cantantes famosos para que les puedan suplir su nesecidad de ser saciados de lo que su carne quiere; una generación descarada, que aun se atreve a decirle a los verdaderos hombres de Dios, que no hablen la verdadera palabra de Dios, que no prediquen del pecado, sino que les hablen cosas que les agraden, que les digan que van a ir a las naciones, que serán ricos y millonarios, que sus iglesias serán semillero del próximo avivamiento mundial, o que serán llamados apóstoles o profetas de la ciudad, que son los príncipes o princesas ungidas de Dios, mimadas, marcados para el éxito y la victoria, aunque estén llenos de pecados y de las obras de la carne.
Al final el Profeta Micaias revela lo que verdaderamente esta pasando en el mundo espiritual, un espíritu de mentira había inundado a todos los cuatrocientos profetas por causa de querer congraciarse con el rey Acab, esto nos muestra lo peligroso que es para un predicador querer quedar bien con los hombres antes que con Dios, tan grave como que un espíritu inmundo sea el que esta inspirando a estos predicadores, y si, yo se que algunos se pueden enojar con esto que escribo, pero eso no es extraño, pues también cuando Micaias dijo esto, uno de los “grandes profetas” se enojo tanto contra el, que hasta lo abofeteo, el Espíritu Santo hablo acerca de esto por medio del apóstol Pablo: 1 Timoteo 4:1-2 Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios, por la hipocresía de mentirosos que han sido cauterizados en su misma conciencia…
Y aunque dice la escritura que mayor castigo será para los falsos profetas y maestros, en la historia que hemos estudiado el castigo divino iba dirigido en contra de Acab y por eso Dios había permitido que estos “profetas” profetizaran falsamente, pues Acab una y otra vez había sido confrontado por los profetas (incluyendo a Elias) y el no había querido corregir su mal comportamiento, por eso estaba cegado no podía y no quería ver que su vida estaba en un total fracaso espiritual y en su orgullo pensaba que todo estaba bien y que seguiría saliendose con la suya, así mismo pasara con esta generación que se comporta como el, si no se arrepiente:
El advenimiento de este impío, que es obra de Satanás, irá acompañado de hechos poderosos, señales y falsos milagros, 10 y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos. 11 Por esto Dios les envía un poder engañoso, para que crean en la mentira, 12 a fin de que sean condenados todos los que no creyeron a la verdad, sino que se complacieron en la injusticia. 2 Tesalonicenses 2:9-12
Que Dios te bendiga.